sábado, 18 de noviembre de 2017

El retorno de Almaviva: Las bodas de Figaro, de Mozart II


ANÁLISIS

Mi primer encuentro con las Bodas de Fígaro fue a través de la película de Milos Forman, Amadeus, y recuerdo esa escena en la que el emperador estaba durmiéndose casi al final de la obra frente a un contentísimo Salieri, que estaba celoso de la obra, pues la consideraba muy superior a lo que él componía. Con el tiempo, pude verla en directo en la Bastilla, aunque ya la había visto varias veces en DVD y también la vi en televisión, en una época en la que era frecuente ver ópera en la televisión pública a una hora normal y no de madrugada, cuando muy excepcionalmente deciden emitir una.
En realidad, no tengo ningún motivo personal por el cual podría deciros porqué tendrías que escuchar esta ópera. Tal y como dije en la Flauta Mágica, el simple hecho de ser de Mozart ya es una garantía de concederle nuestro tiempo, pues como casi todo, por no decir todo, lo que escribió el inmortal compositor de Salzburgo, merece muchísimo la pena.

Desde el momento en el que escuchamos los primeros compases de la obertura, ya intuimos que no vamos a estar ante una ópera más. Esto se lo debemos en parte a la buena adaptación que hizo da Ponte con la obra de Beaumarchais, aunque no voy a discutir si es una buena adaptación o no pues no me he leído la obra de teatro original. Lo que sí tengo entendido, es que es más crítica con respecto a la diferencia de clases, pero en el caso de la ópera de Mozart, nos hace ver algo muy simple y es lo siguiente: en asuntos del corazón, todos los seres humanos somos iguales.

Si tomamos la primera parte como referencia, los personajes que se repiten no es que hayan evolucionado mucho, salvo Almaviva y Rosina. El primero, se torna como una especie de "Don Juan" con poca gracia, y Rosina, parece que la nobleza la ha vuelto más solemne, pero no su espíritu. La actitud de la condesa en "El Barbero", la encontramos ahora en Susana, que es la que aporta toda la picaresca que antes Rosina tenía. Junto a otros personajes que aparecen ahora como Cherubino, Marcellina y Barbarina son sólo satélites que rondan entre las dos parejas principales, que son: Figaro- Susana y Almaviva-Rosina. Toda la intriga cómica gira en torno a estos cuatro personajes principales, y el resto es tan sólo un refuerzo. Lo que hace de esta obra tan genial, es que pese a todo, Mozart logra que todos y cada uno tenga su momento, y que pese a ser una obra cómica en realidad no lo es tanto pues el amor, es una cosa muy seria. De ahí que, cuando al final el Conde reconoce su falta, la música se torna especialmente seria, pues el perdón no es algo que haya que tomarse a la ligera,  y porque la mejor forma que el ser humano aprenda algo, es a través de la risa.

Así pues, ¿qué nos enseña Las Bodas de Figaro?:
- No hagas a los demás lo que no quieras que te hagan a ti. Es decir, no exijas a tu pareja fidelidad eterna si tú no estás dispuesto a mantener tu parte del trato.
- En asuntos del corazón, todos somos iguales. Seas rico, o pobre, todos amamos por igual.
- Como dice el refrán "en la olla no metas la po..." ehh... bueno, más bien no mezcles la relaciones sexuales con las laborales; al menos que te dediques al negocio del sexo. No es una buena idea.

Por cierto, de la tercera y última parte de la trilogía de Fígaro, "La mère coupable (La madre culpable)"  , también se han hecho óperas, pero son todas de la segunda mitad del siglo XX y no han tenido repercusión. Yo, de hecho, no he visto aún ninguna.

GRABACIONES

CD

No tengo este cd, pero lo escuché hace poco y si quieres tener una grabación actual de esta ópera de Mozart, es una opción bastante aceptable. Es bastante dinámica aparte de así apoyar de que se sigan grabando óperas en cd.

 Y ésta es la versión que tengo, aunque no con esa portada. La única pega que le pongo es que en algunos momentos, la dirección de Böhm es un poco lenta, pero a nivel de los cantantes no hay nada que reprocharles.

DVD

Éste es el primer DVD que compré de esta ópera y a nivel de puesta en escena es bastante fiel a la época, musicalmente es muy bueno y tenemos además el gusto de ver a un jovencísimo Bryn Terfel. Es una buena opción, pese a que la calidad de imagen no es la octava maravilla del mundo.


Y éste en concreto, la compré por los cantantes. Está también disponible en cd, y si éstos los encontrara bien de precio igual los compraba, porque esta producción es un poco aburrida de ver. El escenario es siempre el mismo, el rellano de una escalera, pero tanto la actuacion de los cantantes (Ildebrando d'Arcánjelo, Anna Netrebko Y Dorothea Röschmann) como la dirección son muy buenas. Si no te importa que la puesta en escena no sea fiel al 100%, podría ser perfectamente, una primera opción.
Pues con esto termino mi repaso a esta magnífica ópera. Para la próxima voy a tratar otra obra revolucionaria de mi antisemita pedante favorito y que va de unos amantes que se enamoran si quererlo y se les va la pinza. Un coñazo. Pero un coñazo interesante.

No hay comentarios:

Publicar un comentario