miércoles, 21 de marzo de 2018

El Evangelio según San Judas: Jesucristo Superstar, de Andrew Lloyd Webber II


ANÁLISIS

 Después de tantas y tantas obras que he descrito con heroínas que se vuelven locas, barítonos que la lían parda y tenores muy machotes, quizás os resulte raro que ahora me presente con una obra tan fuera de lo común. Sin embargo y a pesar del lenguaje utilizado, en realidad ya esta "ópera rock" que debería ser más bien un "oratorio-rock" ya es una obra de culto. Nunca mejor dicho.

Mi encuentro con esta obra se debe en parte a mi adolescencia, cuando una vez y de madrugada echaron esta película y me chocó bastante. De hecho en su momento no la entendí, y me pareció rara. No entendía porqué esa mezcla entre Jesús que es representado como tal lo muestra la tradición y el resto del reparto que van con vaqueros, pantalones de campana, es decir con una estética "actual" del momento. Así que no le di mucha más vueltas y lo hice especialmente caso. Aún así, siempre me han gustado las películas musicales, y mi interés por Lloyd Weber comenzó después de haber visto en el cine Evita, y posteriormente otras obras. Ya entonces era más mayor, Internet también facilitaba mucho las cosas y le volví a dar a una nueva oportunidad a Jesucristo Superstar, sobre todo al descubrir una grabación más moderna. También tuve la suerte de verlo en directo, aunque en español y pese a que me gustó el espectáculo, las voces eran bastante buenas, con la traducción se pierde muchísimo.

Ante todo, lo que más llama la atención de esta obra es que en realidad es el punto de vista por el cual está escrito. Tim Rice, el letrista, es ateo y se nota, pues en toda ella no vemos ningunos de los milagros que realiza Jesús según los Evangelios y la obra finaliza con la muerte de Jesús en la cruz y no con la resurrección como normalmente se suele terminar el relato de la Pasión. Aún así, la obra en todo momento cuestiona esa divinidad que para muchos representa Jesucristo y lo hace a través de su gran antagonista, que el personaje de Judas. Es más, desde mi punto de vista, Judas es casi más complejo o más que el propio Jesús, ya que representa la racionalidad y lo que es más original aún, no es tan malo como la Biblia lo pinta.

Rice nos describa a Judas como un hombre atormentado que se debate entre sus propias creencias, su deseo de querer cambiar su mundo pero desde un punto de vista pragmático y su amor por Jesús. Este amor, no hay que confundirlo con un amor homosexual ni mucho menos, (pese a que antes de morir cantará lo mismo que María Magdalena), sino es más bien un amor de amigos o una gran admiración. Pero para él lo que Jesús dice no tiene ni pies ni cabeza, la gente lo empieza a tratar como el hijo de Dios, y eso es lo que lo aleja de Judas.  Al final lo acaba por traicionarlo, en un principio porque cree que no lo van a matar y por dinero, pero al tomar conciencia de lo que ha hecho, le entra un sentimiento de culpa que al final acaba por suicidarse. Su música es rápida, cortante y todo lo cuestiona. Preguntas, pero ni siquiera estando muerto, llega a comprender la respuesta. Claro ejemplo lo tenemos en su canción final, la que da nombre al musical... "Si tenías el poder para poner a tus pies a toda una nación, ¿por qué viniste al mundo en una tierra tan lejana y en un momento en el que los medios de comunicación de masas no habían sido inventados?" Y a día de hoy, no sabemos la respuesta.

Por otro lado, tenemos a la Superstar, Jesús. No voy a entrar en debate de si él fue el Hijo de Dios, sino lo voy a comentar como personaje dramático y como es tratado. Jesús está tratado desde un punto de vista racional, con lo cual estamos ante un hombre muy fiel a lo que dice y dispuesto a morir por llegar su mensaje hasta el final, pero aún así no deja de ser un ser humano, que siente rabia (como cuando expulsa a los mercaderes del templo), amor (existe cierta química con María Magdalena) o duda (la magnífica oración del huerto, en donde el cantante tiene que cantar en falsete). Si Jesús fue hijo de Dios o un loco megalomaníaco es algo que el oyente debe decidir.

Al ser un personaje fuera de lo común, ese es el motivo en el cual tanto en la película, como en los escenarios, Jesús lleva su hábito blanco y se le representa como es en su época, mientras el entorno que lo rodea va a un ritmo distinto, de ahí los constantes anacronismos. Es como si nos dijeran que Jesús es un personaje que vivió fuera de su época, incomprendido y además que amenazó el "status quo" de la sociedad de su momento, y ése fue su crimen. Quizás en su día, los judíos pensaron que los dejaban en muy mal lugar, pero también los cristianos la liaríamos parda con la Inquisición. Cada cual que aguante su vela, el ser humano no es perfecto y tendemos a putearnos entre nosotros. Lo hacíamos antes, lo hacemos ahora y en cien años lo seguimos haciendo.

El tercer gran personaje, aunque tiene poca música es María Magdalena, que no hace más que reforzar el lado más humano de Jesús. Un hombre del cual una mujer, puede sentirse atraída. Magdalena no hace más que reforzar ese aspecto.

A pesar de todo, esta obra es profundamente religiosa. Yo me la pongo siempre que estamos en Semana Santa y no me explico porqué ninguna banda de cornetas y tambores tocan algunos temas de Jesucristo Superstar en según que cofradías. Seas creyente o no, a nivel musical es muy original y da mucho que pensar.

Por lo demás... creo que cada cual es mejor que saque sus propias conclusiones. Jesús de Nazaret nos trasmitió hace muchos años un mensaje de paz, de que tenemos que amarnos los unos a los otros... y lo mataron por ello. Y a día de hoy lo recordamos, lo adoramos como alguien fuera de serie, cuando probablemente fue un hombre normal que quiso, sin éxito, cambiar el mundo. O quizás fue Dios hecho hombre, para ver si su más perfecta creación merecía la pena y al ver lo que hicimos, nos abandonó para siempre a nuestra suerte. En cualquier caso, se sigue hablando de él, de su obra y de lo que dijo y lo que no dijo... Y seguimos sin entender absolutamente nada.

GRABACIONES

De Jesucristo Superstar existen un montón de cedés y en varios idiomas, incluso en inglés también hay varios, así que dejo una pequeña muestra:

CD

Esta es la banda sonora de la mítica película de 1973. La orquestación rock es bastante buena y es más fácil de encontrar que el álbum conceptual.

Éste en concreto, es la grabación de 1996. Es mucho más reciente, pero es menos "rock" y quizás sea más musical, en el sentido en el que resulta más expresiva. Personalmente prefiero éste, pues no me gusta mucho el estilo de la música rock de los 70 y éste me resulta más familiar.

DVD

 Aunque cada uno se puede comprar por separado, yo tengo una edición especial donde tengo los dos juntos. Es una edición donde tenemos la película de 1973 con Ted Neeley, rodada en Israel, y una versión cinematográfica de 2000 con Glenn Carter basado en el montaje teatral de 1998. Para mí, este montaje, es una especie de referencia de cómo debería hacerse Jesucristo Superstar. Aunque en mi opinión, tal vez lo que pegaría es que se representase como un concierto y no como una obra teatral


Por último, en 2012 se hizo una gira como un espectáculo de una arena de deportes y curioso, lo compré. Es un coñazo, salvo Mel C como María Magdalena el resto es para mí son para echarlos de comer aparte.

Os deseo una buena Semana Santa y una buena Pascua. Después de las vacaciones, ya volveré con el repertorio clásico habitual, aunque no descarto hablar de más musicales en un futuro. Para compensar, volveré con el bel-canto y con Donizetti, con las aventuras y desventuras de una muchachita muy bruta pero con muy buen fondo.

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